Milton von Hesse: "La modernización de las EPS permitirá dotar de agua a todos los peruanos"

El ministro de Vivienda, Construcción y Saneamiento de Perú, Milton von Hesse, aseguró que la modernización de los servicios de saneamiento y evaluación de las empresas prestadoras de tales servicios (EPS) no significa privatización, alza de tarifas ni despido de trabajadores.

“Queda clarísimo que el proceso de modernización no es privatización, no se van a vender empresas, que son los alcaldes los que van a mantener la participación accionaria y queda clarísimo también que no pasa por despidos ni aumentos de tarifas”, añadió.

“Cualquiera que diga lo contrario, miente descaradamente”, anotó durante una reunión con representantes del sector, directivos de las empresas prestadoras de servicios de saneamiento (EPS), alcaldes y dirigentes de los trabajadores.

Von Hesse explicó que el régimen de administración temporal, si las autoridades locales lo estiman pertinente, puede concluir en una asociación pública-privada, pero siempre y cuando se respete al cien por ciento el empleo, la propiedad municipal y el régimen tarifario.

“Si nos van a asegurar que se van a mejorar los ingresos, los servicios (de agua y saneamiento) y van a mejorar también las remuneraciones internas (de los trabajadores) bienvenido el operador privado”, acotó.

Agregó que el objetivo principal del proceso de modernización es dotar agua de calidad a todos los peruanos, que el gran beneficiado sea el poblador que hoy no tiene el líquido vital y que se mejore el servicio a los que ya lo tienen.

Sostuvo que estamos frente a un problema de muchos años atrás, y que a pesar de los enormes esfuerzos realizados en los últimos años, aún hay cuatro millones de peruanos que no tienen acceso a la conexión de agua. “Hemos destinado más de seis mil millones de soles, tenemos más de mil 500 proyectos a nivel nacional ya financiados”.

De hecho – prosiguió- ya hemos logrado resultados importantes. A nivel rural por ejemplo, cuando empezamos el gobierno, solo uno de cada tres hogares tenía acceso al agua limpia. Hoy son dos de cada tres hogares, es decir, el doble, los que tienen acceso al agua.