La generación de residuos aumentará un 70% en los próximos 30 años, según el Banco Mundial
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“No derrochar para evitar la escasez”. Este viejo refrán tiene mucha validez en estos momentos en que los líderes del mundo, al igual que las comunidades locales, exhortan cada vez más a enmendar la denominada “cultura de lo descartable”. Con todo, más allá de lo que representan para las personas y los hogares, los desechos también constituyen un desafío más amplio que afecta la salud humana y los medios de subsistencia, el medio ambiente y la prosperidad.
La gestión de los desechos sólidos es un problema universal que atañe a todo habitante del planeta. Y con más del 90 % de los desechos que se vierten o queman a cielo abierto (i) en los países de ingreso bajo, son los pobres y los más vulnerables quienes se ven más afectados.
En los últimos años, los deslizamientos de basureros (i) han enterrado a viviendas y personas bajo pilas de residuos. Y son los más pobres los que suelen vivir cerca de los vertederos de basura y alimentan el sistema de reciclado de su ciudad a través de la recolección de desechos, lo que los hace susceptibles de sufrir consecuencias graves para la salud.
“La gestión inadecuada de los desechos está produciendo la contaminación de los océanos del mundo, obstruyendo los drenajes y causando inundaciones, transmitiendo enfermedades, aumentando los afecciones respiratorias por causa de la quema, perjudicando a los animales que consumen desperdicios, y afectando el desarrollo económico, por ejemplo, al perjudicar el turismo”, afirmó Sameh Wahba, director de Desarrollo Urbano y Territorial, Gestión de Riesgos de Desastres, y Resiliencia del Banco Mundial.
Los gases de efecto invernadero provenientes de los desechos son un factor fundamental que contribuye al cambio climático. En 2016, el 5 % de las emisiones mundiales provenían de la gestión de los desechos sólidos, sin incluir el transporte.
“La gestión de los desechos sólidos atañe a todos. Garantizar una gestión eficaz y adecuada de los residuos sólidos es crucial para el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible”, manifestó Ede Ijjasz-Vasquez, director superior de Prácticas Mundiales de Desarrollo Social, Urbano y Rural, y Resiliencia del Banco Mundial. “Sin gestión de los desechos, su vertido o quema perjudica la salud humana, daña el medio ambiente, afecta el clima, y dificulta el desarrollo económico en países tanto pobres como ricos por igual”.
Informe What a Waste 2.0
Si bien este es un tema del que la gente tiene conciencia, la generación de desechos está aumentando a un ritmo alarmante. Los países están desarrollándose rápidamente sin haber establecido sistemas adecuados para gestionar la distinta composición de desechos que producen los ciudadanos. Las ciudades, donde habita más de la mitad de los seres humanos y en las que se genera más del 80 % del producto interno bruto (PIB) del mundo, están en una posición de vanguardia en lo que respecta a hacer frente al desafío de los desechos a nivel mundial.
Según el informe del Banco Mundial titulado What a Waste 2.0 (Los desechos 2.0), (i) en el mundo se generan anualmente 2010 millones de toneladas de desechos sólidos municipales, y al menos el 33 % de ellos no se gestionan sin riesgo para el medio ambiente.
En el informe de 2018, que es una actualización de una edición anterior, se proyecta que la rápida urbanización, el crecimiento de la población y el desarrollo económico harán que la cantidad de desechos a nivel mundial aumente un 70 % en los próximos 30 años y llegue a un volumen asombroso de 3400 millones de toneladas de desechos generados anualmente.
¿Cuánta basura representa ese número?
Tomemos el caso de los desechos de plástico, que están llenando los océanos y constituyendo el 90 % de los detritos marinos. Tan sólo en 2016, en el mundo se generaron 242 millones de toneladas de desechos de plástico, el equivalente de unos 24 billones de botellas de plástico de 500 ml. Con el volumen de agua de estas botellas se podrían llenar 2400 estadios olímpicos, 4,8 millones de piletas olímpicas, o 40 000 de bañaderas. Dicho número de toneladas también equivale al peso de 3,4 millones de ballenas azules adultas o a un conjunto de 1,376 edificios Empire State.
Y eso es tan sólo el 12 % del total de desechos generados anualmente.
Además de las tendencias globales, en What a Waste 2.0 (i) se presenta el estado de la gestión de los desechos sólidos en cada región. Por ejemplo, la región de Asia oriental y el Pacífico es en la que más desechos se generan actualmente, el 23 %, a nivel mundial. Y aunque en los países de ingreso alto vive sólo el 16 % de la población del mundo, en esas naciones, en conjunto, se genera casi la tercera parte (34 %) de los desechos a nivel mundial.
Como se prevé que la generación de desechos aumente con el desarrollo económico y el crecimiento de la población, es probable que en los países de ingreso mediano bajo se registre el mayor aumento de la producción de desechos. África al sur del Sahara y Asia meridional son las regiones de crecimiento más rápido, donde se prevé que, para 2050, la generación total de desechos se triplicará y se duplicará con creces, respectivamente, y constituirá el 35 % de los desechos a nivel mundial. En la región de Oriente Medio y Norte de África, también se prevé que se duplique la generación de desechos para 2050.
Los países de ingreso mediano alto y los de ingreso alto proveen servicios casi universales de recolección de residuos, y más de la tercera parte de los desechos de los países de ingreso alto se recuperan a través del reciclado y el compostaje. En los países de ingreso bajo se recoge alrededor del 48 % de los desechos en las ciudades, pero sólo el 26 %, en las zonas rurales, y se recicla tan sólo el 4 % a nivel nacional. En general, el 13,5 % de los desechos a nivel mundial se recicla y el 5,5 % se composta.
Hacia la gestión sostenible de los desechos sólidos
“La gestión ecológicamente racional de los desechos afecta muchísimos aspectos cruciales del desarrollo”, afirmó Silpa Kaza, especialista en desarrollo urbano del Banco Mundial y autora principal del informe What a Waste 2.0. (i) “Sin embargo, la cuestión de la gestión de los desechos sólidos suele pasarse por alto, al momento de planificar ciudades y comunidades sostenibles, sanas e inclusivas. Los Gobiernos deben tomar medidas urgentes para abordar la gestión de los desechos en beneficio de su población y el planeta”.
Pasar a una gestión sostenible de los desechos exige esfuerzos duraderos y entraña un costo significativo. Según What a Waste 2.0, (i) la gestión de los desechos puede ser la partida presupuestaria más importante para muchos Gobiernos locales. En los países de ingreso bajo en general dicha gestión constituye el 20 % de los presupuestos municipales.
¿Vale la pena el costo?
Sí. Las investigaciones indican que invertir en la gestión sostenible de los residuos sí tiene sentido desde el punto de vista económico. Los desechos no recogidos y mal eliminados tienen un impacto significativo en la salud y el medio ambiente. El costo de abordar este impacto es muy superior al costo de desarrollar y poner en funcionamiento sistemas sencillos y adecuados de gestión de los desechos.
Para ayudar a satisfacer la demanda de financiamiento, el Banco Mundial está colaborando con países, ciudades y asociados de todo el mundo (i) para generar y financiar soluciones eficaces que pueden dar lugar a mejoras en los ámbitos ambiental, social y de capital humano.
Desde 2000, el Banco Mundial ha comprometido más de USD 4700 millones para más de 340 programas de gestión de los desechos sólidos en todo el mundo, como las siguientes iniciativas y áreas de colaboración.
Financiamiento de la gestión de los desechos
Teniendo en cuenta el costo abrumador de los sistemas de gestión de los residuos sólidos, su financiamiento suele ser un desafío importante. Las inversiones del Banco Mundial se han multiplicado para ayudar a los países a satisfacer esa demanda.
En Azerbaiyán, (i) los préstamos del Banco Mundial respaldaron la rehabilitación del principal vertedero y la creación de una empresa de propiedad estatal de gestión de los desechos, aumentando la población atendida por el sistema formal de gestión de los residuos sólidos del 53 % en 2008 al 74 % en 2012. Ese respaldo también condujo a promover prácticas sostenibles de gestión de los desechos, y ayudó a lograr una tasa de reciclado y reuso del 25 %.
En China, (i) un programa de incentivos basado en los resultados ha inducido a la separación de los desechos de las cocinas residenciales. El préstamo de USD 80 millones también ha respaldado la construcción de una instalación moderna de digestión anaeróbica para el fermento y la recuperación de energía a partir de desechos orgánicos, que beneficiará a 3 millones de personas.
En Nepal, (PDF, en inglés) un proyecto de financiamiento basado en los resultados, por valor de USD 4,3 millones, permitió aumentar el cobro de tarifas a los usuarios y mejorar los servicios de recolección de residuos en cinco municipios, beneficiando a 800 000 residentes.
Reducción de las emisiones de carbono, aumento de la resiliencia
Si no se introducen mejoras en el sector, las emisiones relacionadas con los desechos sólidos probablemente aumentarán a 1600 millones de toneladas de CO2 equivalente para 2050. La mejora de la gestión de los desechos ayudará a las ciudades a ganar resiliencia frente a las condiciones climáticas extremas que producen inundaciones, dañan la infraestructura, desplazan a comunidades y destruyen sus medios de subsistencia.
En Pakistán, (i) con un proyecto por valor de USD 5,5 millones se respaldó a una instalación de compostaje en Lahore en lo que respecta al desarrollo del mercado y la venta de créditos de reducción de las emisiones en virtud del Protocolo de Kyoto de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC). Las actividades dieron lugar a reducciones de 150 000 toneladas de CO2 equivalente y al aumento del volumen de la producción diaria de compost, de 300 a 1000 toneladas.
En Vietnam, (i) las inversiones en la gestión de los desechos sólidos están ayudando a la ciudad de Can Tho a evitar la obstrucción de drenajes que podría ocasionar inundaciones. Análogamente, en Filipinas, (i) las inversiones están ayudando a Metro Manila a reducir el riesgo de inundaciones minimizando los desechos sólidos que terminan en los cursos de agua. Centrándose en mejores sistemas de recolección, planteamientos basados en la comunidad, y el suministro de incentivos, las inversiones en la gestión de los residuos sólidos están contribuyendo a reducir la basura marina, particularmente en Manila Bay.
No dejar a nadie atrás
Cuando se lo apoya y organiza adecuadamente, el reciclado informal puede crear empleo, mejorar la competitividad industrial a nivel local, reducir la pobreza y disminuir el gasto municipal. Sin embargo, la realidad de más de 15 millones de recolectores informales de desechos en el mundo —comúnmente mujeres, niños, ancianos, desocupados o migrantes— continúa siendo condiciones insalubres, falta de protección social o de seguro de salud, y estigma social persistente.
Según What a Waste 2.0, (i) las intervenciones eficaces para mejorar los medios de subsistencia de los recolectores de desechos son la formalización e integración de su actividad en la economía, el fortalecimiento de la cadena de valor del reciclado, y la consideración de otras oportunidades de empleo.
En la Ribera Occidental, (i) por ejemplo, con los préstamos del Banco Mundial se ha respaldado la construcción de tres vertederos al servicio de más de 2 millones de residentes, se permitió el cierre del basurero, se prepararon programas de medios sostenibles de subsistencia para los recolectores de desechos, y se vincularon los pagos a la mejor prestación de servicios a través del financiamiento basado en los resultados.
Especial atención en los datos, la planificación y la gestión integrada de desechos
Entender cuántos desechos se generan —así como de qué tipo—, y dónde, ayuda a los Gobiernos locales a asignar el presupuesto y la tierra de manera realista, a evaluar las tecnologías pertinentes, y a considerar los asociados estratégicos —como el sector privado o las organizaciones no gubernamentales— para la prestación de servicios.
Poniendo una especial atención en los datos relativos a los desechos, es fundamental apoyar a los países en su toma de decisiones críticas en materia de financiamiento, políticas y planificación del sector de la gestión de desechos sólidos. Las soluciones incluyen:
• Proporcionar financiamiento a los países que tienen mayores necesidades, en particular los de más rápido crecimiento, para desarrollar sistemas modernos de gestión de desechos.
• Apoyar a los principales países que generan desechos para reducir el consumo de plásticos y la basura marina a través de programas integrales de reciclado y disminución de desechos.
• Reducir el desperdicio de alimentos mediante la educación del consumidor, la gestión orgánica y programas de gestión coordinada de los residuos de alimentos.
No hay tiempo que perder
En una época de rápida urbanización y de crecimiento de la población, la gestión de los desechos sólidos es crucial para que las ciudades y las comunidades sean sostenibles, sanas e inclusivas. Si no se toman medidas, el mundo se encaminará peligrosamente al aumento de los desechos y una contaminación extraordinaria. Se pagaría un precio aún más alto que el actual en términos de vidas, medios de subsistencia y el medio ambiente.
Ya hay muchas soluciones para invertir esa tendencia. Lo que hace falta es una acción urgente a todos los niveles de la sociedad.
El momento de actuar es ahora.
Visite el sitio: www.worldbank.org/what-a-waste (i) para acceder al conjunto completo de datos y para descargar el informe What a Waste 2.0: A Global Snapshot of Solid Waste Management to 2050 (Los desechos 2.0: Un panorama mundial de la gestión de los desechos sólidos hasta 2050). (i)
What a Waste 2.0 fue financiado por el Gobierno de Japón a través del Centro de Enseñanza sobre el Desarrollo, del Banco Mundial, en Tokio.