Castilla-La Mancha, región pionera en España en implantar actuaciones de economía circular

Desde que en julio del año 2019 nuestro presidente, Emiliano García-Page, decidiera crear la consejería de Desarrollo Sostenible nada más arrancar su segundo mandato, la economía circular siempre ha jugado un papel capital para nuestro Ejecutivo autonómico.

El ejemplo más claro fue la creación dentro de la estructura de la consejería, de una dirección general que llevó su nombre. Ese fue el inició de una meteórica trayectoria que rápidamente puso a la economía circular y sus objetivos en el centro de nuestras políticas. 

Echando la vista atrás, comprobamos que, en apenas cinco meses, los que trascurrieron entre la creación de la consejería y la dirección general, y el mes de noviembre de 2019, momento de la aprobación de la que fue la primera Ley de Economía Circular de España, Castilla-La Mancha había logrado en un tiempo récord disponer de una normativa pionera, que no solamente ha sido imitada en nuestro país, sino también citada como ejemplo en diferentes estancias europeas.

La economía circular es un factor clave en el desarrollo sostenible de nuestra región, una herramienta fundamental que nos permite transitar hacia un nuevo modelo de producción y consumo circular.

Desde entonces la economía circular ha sido un factor clave en el desarrollo sostenible de nuestra región, una herramienta fundamental que nos permite transitar hacia un nuevo modelo de producción y consumo circular, más respetuoso con nuestro medio ambiente.

Por este motivo, vamos a seguir implantando este nuevo modelo que persigue ampliar la vida útil de los productos y disminuir la generación de residuos tal y como recoge nuestra hoja de ruta que es la Estrategia de Economía Circular de Castilla-La Mancha 2030.

En estos momentos, está finalizando y procederemos a su evaluación, el Plan de Acción de Economía Circular 21-25 y pondremos en marcha el nuevo Plan de Acción 26-30. Tras el desarrollo de las medidas recogidas en el actual plan de acción, y su evaluación, se establecerán las nuevas a incluir en el segundo plan de acción en función de las necesidades de nuestra región. 

Tenemos claro que la economía circular representa una gran oportunidad para nuestra región. Crea riqueza y genera empleo, como lo demuestra el que estén llegando empresas líderes en el sector.

Además, tenemos claro que la economía circular representa una gran oportunidad para nuestra región. Crea riqueza y genera empleo, como lo demuestra el que estén llegando empresas líderes en el sector que están apostando por instalarse en Castilla-La Mancha.

Siempre desde el estricto cumplimiento de la normativa medioambiental por el que se rige nuestra administración, consideramos que la consecución del reto de lograr la transición hacia la economía circular únicamente será posible a través de la colaboración, participación e implicación de toda la sociedad, no solo de las administraciones públicas sino también de todos los sectores económicos (fabricación, producción, distribución y gestión de residuos), los agentes sociales, y muy especialmente los consumidores y ciudadanos, cuyas decisiones de compras de productos, así como su comportamiento en la separación de residuos son fundamentales.

En este punto ya estamos adoptando medidas para alcanzar los ambiciosos objetivos marcados. Junto a la sensibilización de toda la ciudadanía en base a una correcta y comprometida gestión de nuestros residuos, y lo que esto implica, nuestro tejido empresarial debe jugar un papel determinante para que la economía circular sea un modelo instaurado a todos los efectos.

Consideramos que la consecución del reto de lograr la transición hacia la economía circular únicamente será posible a través de la colaboración, participación e implicación de toda la sociedad.

Es por eso el que también hayamos sido la primera comunidad autónoma en crear una Red de Agentes en Economía Circular de Castilla-La Mancha, que en la actualidad está integrada por 80 empresas referentes, de diferentes sectores, y que está abierta a todas aquellas que quieran sumarse.

Esta Red de empresas nos están aportando su experiencia profesional ayudándonos a recuperar y reutilizar una serie de materias primas que podemos conseguir de productos reciclados y que nos permiten poder avanzar en economía circular.

Iniciativas como esta han sido reconocidas y nos han llevado a liderar en Toledo el pasado mes de octubre uno de los actos más destacados en materia de economía circular de los que se celebraron en España, como fue el segundo encuentro de la Red de Agentes de Economía Circular organizado por Castilla-La Mancha en el marco del semestre de la presidencia española de la Unión Europea.

Para finalizar no me quiero olvidar de destacar el nuevo Plan de Prevención y Gestión de Residuos de Castilla-La Mancha 2024-2030, un plan muy ambicioso en el que hemos querido que toda la sociedad de la región participe y contribuya para enriquecer sus objetivos. Un Plan que incluye objetivos como la reducción de la generación y el uso de plásticos de un solo uso, un programa de lucha contra los plásticos en origen, o la mejora de los residuos urbanos.

Además, de manera transversal, quiero resaltar que trabajamos en la primera Ley regional de Cambio Climático, Ley en la que ya hemos dado el primer paso con la consulta pública previa en la que estamos inmersos hasta el próximo 9 de junio de 2024.

La economía circular se implanta con paso firme en Castilla-La Mancha con medidas y actuaciones vanguardistas y modélicas que nos convierten en una sociedad respetuosa con nuestro medio ambiente que afronta los grandes retos que tiene por delante.

Concluyo subrayando que estamos en el buen camino. Cumplimos con los objetivos que nos marcamos. Y podemos resaltar que la economía circular se implanta con paso firme en Castilla-La Mancha con medidas y actuaciones vanguardistas y modélicas que nos convierten en una sociedad progresista, respetuosa con nuestro medio ambiente que afronta los grandes retos que tiene por delante, abogando por un modelo más sostenible de consumo y gestión de nuestros bienes, materias primas y gestión de nuestros residuos.

Y seguiremos buscando alianzas estratégicas de colaboración tanto público-privadas como con otras instituciones como las universidades, colectivos y asociaciones, y organismos de la administración pública nacional e internacional, para conseguir estos objetivos.