AMIBLU España aumentó un 12% su facturación en 2022, alcanzando los 53 millones de euros

El fabricante de tuberías y accesorios de Poliéster Reforzado con Fibra de Vidrio (PRFV) Amiblu ha cerrado el año 2022 con una facturación de 53,1 millones de euros en España, un 12% más que el año anterior, cuando facturó 46,7 millones de euros. El negocio exterior alcanza actualmente el 80% de las ventas de la compañía, siendo muy importante la presencia de Amiblu en Latinoamérica y África. 

A pesar de la incertidumbre por la coyuntura actual, en 2022 Amiblu ha incrementado la facturación y hace un balance muy positivo. El aumento del negocio se debe, principalmente, al crecimiento de las ventas en varios países de Latinoamérica y África, que necesitan llevar a cabo grandes proyectos de saneamiento, agua potable y proyectos industriales, y al aumento de la producción de tuberías no circulares. 

En los últimos meses, se ha producido una creciente demanda de tuberías no circulares en Europa, a causa del envejecimiento de los sistemas de alcantarillado urbano en grandes ciudades, construidos hace decenas de años y que necesitan ser rehabilitados. Gracias a su diseño y sistema de implementación, las tuberías no circulares permiten rehabilitar los colectores de aguas antiguos, de forma definitiva y sin afectaciones importantes en la vía pública, como sería el levantamiento de suelo. Las tuberías no circulares se introducen dentro de los colectores antiguos –ya deteriorados– mediante una tecnología sin zanja, transformando el antiguo colector en un colector completamente nuevo y con una vida útil muy superior a la de los materiales tradicionales.

Uno de los proyectos más destacados en los que ha trabajado Amiblu para su división de tuberías no circulares (NC Line) es el del colector de Gros en la playa de Zurriola, en San Sebastián, donde se han instalado 200 metros lineales de tubería no circular de 2500x2000 mm de diámetro, que, gracias a su diseño y sistema de implementación, ha permitido rehabilitar este colector de agua residual construido hace más de un siglo y que da servicio a toda la ciudad. 

Además, la división de obras industriales de Amiblu también ha experimentado un fuerte crecimiento. Amiblu trabaja actualmente sendos proyectos de LNG (Gas licuado), plantas de energía y centrales nucleares, donde el PRFV ofrece una mayor resistencia a la corrosión y otras propiedades ventajosas respecto a los materiales tradicionales, como el hormigón o el acero, más costosos de fabricar, instalar y mantener y con mayor impacto ambiental. 

Plan estratégico de transición ecológica 

En los últimos tres años, y gracias al plan estratégico de transición ecológica “Amiblu Green 2022-2024”, la compañía ha realizado grandes inversiones en su planta de Camarles (Tarragona) para reducir las emisiones de CO2 un 62%, al pasar de las 1.700 toneladas de CO2 en el año 2020, a las 650, en 2022. 

Por un lado, ha obtenido la máxima certificación de energía verde procedente de fuentes limpias, “Energía sostenible 100%”, que otorga la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), y el triple sello energético “Calculo, Reduzco, Compenso”, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. 

También ha instalado más de un millar de placas fotovoltaicas en su planta de Camarles y ha implementado la circularidad en su sistema de producción, al utilizar resinas recicladas en su proceso de fabricación y reutilizar los residuos excedentes. Amiblu también dispone de EPDs (Declaración Ambiental del Producto) para todos los productos que fabrica, de acuerdo con los estándares europeos de certificación ambiental, y, recientemente, ha incorporado una ECOTasa en su oferta comercial. El principal objetivo del plan de transición ecológica es convertir la planta de producción de Camarles en la primera fábrica europea de tuberías de PRFV cero emisiones netas en los próximos meses. 

“A pesar de la coyuntura económica y el aumento del precio de la energía, así como de las materias primas, hemos crecido en  ventas, tanto en el mercado local como en el extranjero. En la situación actual, nuestro producto se convierte en el más interesante del mercado por los bajos costes de explotación que conlleva su uso gracias al excelente comportamiento hidráulico, su alta durabilidad y ausencia de corrosión. Todo ello, posiciona al Poliéster Reforzado con Fibra de Vidrio como un valor en alza en los futuros proyectos financiados por los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PPTR). Necesitamos que las administraciones locales valoren nuestro esfuerzo y apoyen nuestra producción en las obras públicas españolas”.  explica Xavier Arasanz, Director General de Amiblu en España, quien valora muy positivamente los resultados económicos obtenidos.