Santa Cruz de Tenerife confía en las tuberías de Saint Gobain PAM para sus estaciones de aguas residuales
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Santa Cruz de Tenerife, ciudad conocida por su belleza natural en las Islas Canarias, se encuentra en la etapa final de un proyecto ambicioso que mejorará significativamente la gestión de sus aguas residuales y fortalecerá su compromiso con el medio ambiente. El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife y la Empresa Mixta de Aguas de Santa Cruz de Tenerife (EMMASA) lideran este esfuerzo, que tiene como objetivo principal la provisión de infraestructuras ambientales, la promoción de la Economía Circular y la mejora de la situación hídrica de las aguas subterráneas.
Un presupuesto de 733.250,33 euros respalda esta causa, y los contratistas, Santacrucera de Aguas, Vifemar Construcciones y Sistemas SL, junto con Probisa, han llevado a cabo esta impresionante tarea. Para contribuir a este proyecto y garantizar su éxito, Saint-Gobain PAM ha suministrado un producto clave: la gama PAM Integral pH1.
La tubería elegida ha demostrado ser una elección óptima para este proyecto debido a que su resistencia mecánica es excepcional, lo que es esencial considerando que parte de la infraestructura discurre por la calzada urbana. Además, el revestimiento interior de poliuretano "PH1" garantiza una protección adecuada frente a las aguas residuales, admitiendo efluentes con un rango de Ph=1-13. Esto es esencial para contrarrestar posibles ataques químicos generados por el ácido sulfhídrico en este tipo de aguas y en entornos cálidos.
La obra comenzó en septiembre de 2023 y está programado que finalice durante los próximos meses. En este periodo, se han implementado varias conducciones con el tubo de fundición tipo integral PH1 suministrado por Saint-Gobain PAM. Estas conducciones desempeñarán un papel crucial en la transferencia de aguas residuales desde la zona de Añaza, en Santa Cruz de Tenerife, hasta el colector suroeste de la ciudad.
La participación de Saint-Gobain PAM en este proyecto es un claro ejemplo de cómo la industria y la innovación pueden unirse para avanzar en la dirección de un futuro más sostenible. La elección de materiales de alta calidad, resistentes y duraderos son esenciales para garantizar que las inversiones en infraestructura ambiental tengan un impacto positivo a largo plazo.