Los envases no son el principal problema ambiental relacionado con el plástico
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El plástico se utiliza de muchas maneras y en grandes cantidades en toda Europa. La preocupación por el medio ambiente hace que sea uno de los principales focos de atención de las políticas. En la actualidad, la mayoría de las medidas políticas se centran en los envases de plástico, a pesar de que una gran proporción de plásticos se utiliza para aplicaciones no relacionadas con el envasado, como la construcción, el mobiliario y la electrónica de consumo, que según estimaciones recientes podrían representar hasta el 74% del consumo.
Resulta crucial mejorar la información, la trazabilidad y los datos sobre los flujos de plásticos no destinados a envases, ya que los datos que existen son muy limitados tanto a escala nacional como de la UE. De esta manera, se pretende fundamentar el desarrollo de políticas y medidas eficaces que se centren en este importante flujo de residuos, apoyen una mejor gestión de estos materiales y aumenten la eficiencia de los recursos, en consonancia con los objetivos del plan de acción para una economía circular y reducción del impacto ambiental.
Los plásticos no destinados a envases forman parte de un sistema de productos muy complejo, que abarca muchos sectores, categorías de productos y movimientos comerciales internacionales. Entre las aplicaciones de los plásticos no destinados a envases se incluyen el uso a largo plazo en edificios y vehículos; artículos de uso cotidiano, como teléfonos móviles y equipamiento deportivo; y productos desechables de bajo coste, como pañales y cepillos de dientes.
Esto plantea importantes retos adicionales a la hora de comprender, gestionar y reciclar los flujos de materiales de los plásticos utilizados en aplicaciones distintas de los envases, debido a factores como a mezcla de materiales en productos complejos y la posible presencia de aditivos peligrosos o que pueden impedir una reutilización rentable de los materiales.
Producidos principalmente a partir de combustibles fósiles, la fabricación de plásticos utiliza una cantidad sustancial de recursos naturales y es una fuente importante de emisiones globales de carbono. Además, la durabilidad inherente de los plásticos significa que los artículos desechados permanecen en el medio ambiente durante generaciones.
Consumo europeo
Según fuentes de la industria, la demanda de plástico para la UE27+3 era de 50 millones de toneladas en 2021. De esta cifra, el 39% se destina a envases. El 61% restante se divide en edificación y construcción (21%), industria del automóvil (9%), equipos eléctricos y electrónicos (7%), artículos para el hogar (4%), agricultura (3%) y "otros" (17%) (Plastics Europe, 2022).
La industria utiliza muchos tipos diferentes de plásticos (polímeros) y, las aplicaciones no relacionadas con el envasado dominan la demanda de tres de los seis tipos de plástico más comunes: Cloruro de polivinilo, polipropileno y poliestireno.
De acuerdo con la evolución prevista de los patrones de consumo, se espera que la demanda de productos manufacturados siga aumentando en la mayoría de los sectores. Estos productos contendrán componentes plásticos, por lo que se producirá un aumento del consumo de plásticos en aplicaciones distintas de los envases. Además, es probable que la presión de los responsables políticos y del público impulse una disminución del volumen de envases de plástico, mediante la sustitución de materiales y los envases reutilizables.
La influencia combinada de estos cambios sugiere que la proporción de plástico asociado a aplicaciones no relacionadas con el envasado en los flujos totales de plástico puede ser aún mayor en los próximos años.
Gestión de residuos
Los productos de plástico que no son envases suelen tener una vida útil mucho más larga que los envases. Por ejemplo, mientras que la vida útil de los envases de plástico suele ser de sólo semanas o meses, los plásticos utilizados en vehículos, edificios y artículos domésticos pueden permanecer en uso durante décadas. Esto significa que el "stock" de plástico en entornos comerciales y domésticos aumenta constantemente. Material Economics (2022) calcula que las "existencias de plástico" en Europa ascienden a unos 550 millones de toneladas. También significa que los plásticos no envasados, aunque representan hasta el 74% de la demanda, sólo representan el 40% de los residuos plásticos anuales.
Los índices de recogida de residuos plásticos procedentes de la mayoría de fuentes distintas de los envases son inferiores a los índices de recogida de residuos procedentes del sector de los envases. Es probable que esto se deba a la mayor vida útil de los artículos no envasados, lo que lleva a una acumulación en hogares y empresas de existencias de plástico no envasado, incluidos tanto los productos en uso como los que ya no se utilizan, pero se mantienen almacenados.
Además, muchos artículos no envasados contienen mezclas complejas de tipos de polímeros, a menudo en combinación con otros materiales. Esto complica su segregación cuando se desechan y significa que a menudo se incluyen en los residuos mezclados que se envían al vertedero o para la recuperación de energía.
Por otro lado, los avances en el aumento de las tasas de reciclado de residuos de envases han sido superiores a los avances en la mejora de las tasas de reciclado del total de residuos generados. Esto refleja la importancia de contar con políticas sólidas, que incluyan objetivos de reciclado, para impulsar mejoras en la gestión de residuos, ya que este flujo de residuos es el objetivo del acervo de la UE.