¿Qué hace una vajilla sucia flotando en la ría de Bilbao?
- 2505 lecturas
- 2505 lecturas
La ría de Bilbao ha amanecido hoy con una escultura que simula una vajilla sucia de 9x9 metros (el equivalente a un edificio de tres plantas) fondeada frente al Palacio Euskalduna. Es parte de la campaña “Cierra el Grifo” con la que la empresa ACCIONA Agua quieren concienciar a los ciudadanos de la necesidad de hacer un consumo más racional del agua. Con esta iniciativa, ACCIONA Agua se suma al Día Mundial del Agua, que este año tiene como tema central la gestión del agua residual que es uno de los grandes retos medioambientales que afronta nuestro planeta.
En España, cada familia genera una media de 1.000 litros de aguas residuales al día, un caudal que debe ser tratado en depuradoras que, a su vez, consumen energía con el consiguiente impacto medioambiental asociado. Por ello, ACCIONA Agua, dentro de su apuesta por la sostenibilidad como eje de su modelo de negocio hace énfasis en la importancia de que cada ciudadano sea consciente del uso que hace del agua y del efecto directo que como consumidores tienen en la sostenibilidad de la gestión del ciclo del agua.
Este año, el Día Mundial del Agua tiene como tema central el Agua Residual, ya que Naciones Unidas quiere concienciar de la urgente necesidad de que el agua sea tratada y, en la medida de lo posible, reutilizada. Así, con esta conmemoración, se desea potenciar el cumplimiento de uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible que establece “la mejora de la calidad del agua, reducción de la contaminación, eliminación de los vertidos y minimización de la liberación de productos químicos y materiales peligrosos, reducción a la mitad el porcentaje de aguas residuales no tratadas y aumentar sustancialmente el reciclaje y la reutilización segura del agua”.
En el mundo, tan solo el 20% de las aguas residuales reciben un tratamiento adecuado, y se observa una gran desigualdad entre los países con elevadas rentas (que depuran más 70% de sus aguas residuales) respecto a aquellos cuya riqueza es baja (8% de capacidad de tratamiento). Las consecuencias no son sólo medioambientales, sino también sanitarias y relativas al bienestar de la población así como al desarrollo económico. Según la ONU, al menos 1.800 millones de personas en el mundo utilizan una fuente de agua potable que está contaminada con materia fecal y cada día, cerca de 1.000 niños mueren a causa de enfermedades diarreicas prevenibles relacionadas con el agua y el saneamiento.
Para lograr este reto, es necesario, por una parte, concienciar a la población sobre el uso responsable del agua de cara a minimizar la generación de aguas residuales, y por otra parte, desarrollar tecnologías de depuración cada vez más económica y ecológicamente sostenibles.
ACCIONA Agua ha llevado a cabo más de 300 depuradoras de aguas residuales, con una capacidad total de más de 13,5 millones de m3/día, lo que supone una población equivalente de más de 55 millones de habitantes. Entre sus depuradoras más emblemáticas figuran la de Atotonilco, en México, que es la más grande del mundo, o la de La Chira, en Lima, que está permitiendo regenerar la zona costera, antes ambiental y socialmente depauperada.
ACCIONA Agua es líder en investigación para mejorar la eficiencia de las depuradoras, reduciendo el consumo energético y mejorando las posibilidades de reutilización del agua depurada. Así, destacan investigaciones europeas desarrolladas en su centro de I+D de Barcelona como el LIFE + RENEWAT que tiene como objetivo sincronizar los procesos de las depuradoras con la disponibilidad de energías renovables integradas en la planta, para reducir hasta un 30% su dependencia energética, el proyecto LIFE+ Brainymem que, además de reducir el consumo energético y la emisión de gases efecto invernadero, disminuirá la concentración de contaminantes recalcitrantes (restos de químicos) en el agua residual, el LIFE+ Celsius que está desarrollando un sistema de tratamiento de agua para climas cálidos que se caracterice por el bajo consumo energético o el LIFE+RAMSES que pretende conseguir mediante nuevas vías, agua de reutilización de mayor calidad a menor coste, para dar respuesta al déficit hídrico existente en Europa.