LIFE REFIBRE promueve la gestión integrada de los residuos plásticos reforzados con fibra de vidrio

El proyecto LIFE REFIBRE ha concluido, tras más de tres años de trabajo y un total de cinco talleres, desarrollados por cada uno de los miembros del consorcio que ha participado en él: CARTIF, ICCL, GRUPO INCOSA, BLASGÓN y SAN GREGORIO, lo que ha permitido aportar una visión global del proceso de valorización de los residuos plásticos reforzados con fibra de vidrio, que conforman las palas de aerogeneradores, explicada en primera persona, con las dificultades que se han ido encontrando, las lecciones aprendidas durante la ejecución y el resultado conseguido.

En todos los talleres realizados, se ha contado con la participación de varios expertos de primera línea para poder transmitir a los asistentes la importancia que tienen las iniciativas innovadoras para la consecución de la transición verde, en general, y para el desarrollo de la economía circular, en particular, y, así, de la mano de investigadores, de proyectos de I+D+i y de la implicación de la industria, se ha buscado la aportación de todos los sectores.

En el último taller, ejecutado por CARTIF, se ha reflexionado sobre la importancia de la aplicación de la economía circular en los nuevos proyectos que se lleven a cabo, siempre de la mano de la innovación. En la primera parte del mismo, se compartió la visión de la circularidad en la construcción, gracias a la guía de la jefa del grupo de Carreteras y Medio Ambiente del Centro Tecnológico Construcción en ACCIONA, Edith Guedella, a la que relevó José Luis Martín, responsable de proyectos renovables en Castilla y León de IBERDROLA, quien aportó ejemplos de implementación del concepto de economía circular en los parques eólicos de la comunidad.

Continuaron con el taller Tomás Romagosa, director técnico de la Asociación Empresarial Eólica, quien explicó la situación actual del sector eólico en España, la regulación, iniciativas y posibles soluciones, junto a Ángel Sampedro, profesor-doctor en Ingeniería de Carreteras de la Universidad Alfonso X El Sabio, quien habló del estado de la red, el futuro inmediato y los nuevos retos, mientras que los investigadores del centro tecnológico CARTIF, Alicia Aguado y Francisco Verdugo, se encargaron de trasladar los resultados obtenidos, destacando la problemática actual de las palas aerogenerador, una vez alcanzado su fin de vida útil, describiendo las principales acciones, desarrolladas dentro del marco del proyecto, desde la etapa de acopio y pretratamiento; el diseño y construcción del prototipo de reciclado y la obtención de la fibra de vidrio; la introducción de la fibra de vidrio en mezclas asfálticas; y el estudio del impacto medioambiental y socioeconómico del proyecto.

Asimismo, en este último taller, se incidió en la importancia de los materiales compuestos, el nexo de unión que el proyecto LIFE REFIBRE ha sido capaz de utilizar como medio para unir al sector eólico y de la carretera, a través de profesionales como Helena Abril, técnica de dinamización en la Asociación Española de Materiales Compuestos, en compañía de Luis Palenzuela, jefe de proyecto en el centro tecnológico TECNALIA, quienes compartieron casos de éxito y la importancia del desarrollo en la investigación de los materiales compuestos, puesto que se trata de un mundo que ofrece muchas posibilidades y que tiene por delante un interesante futuro. Por último, Ernesto Sáenz, del departamento de energía eólica del Centro Nacional de Energías Renovables, proporcionó las consideraciones a tener en cuenta en el reciclado de palas eólicos y, junto a Jorge Dot, director en Wunder Hexicon en España y Pablo Gascón, ingeniero R&D en WunderHexicon y socio en WunderOcean, expusieron un proyecto de innovación, en el espacio reservado para acciones que impulsan la I+D+i, demostrando que queda mucho camino por recorrer y que el límite lo ponemos nosotros.

El proyecto LIFE REFIBRE-LIFE16 ENV/ES/000192 es desarrollado gracias a la contribución del programa europeo LIFE, cuyos socios son BLASGON, CARTIF, INCOSA, SAN GREGORIO y el ICCL –INSTITUTO DE LA CONSTRUCCCIÓN DE CASTILLA Y LEÓN-, a quien corresponde su coordinación.