Licitados los contratos de las EDAR de Aínsa, Boltaña y Villanúa en Aragón

Las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) de Formigal-Sallent y Ansó ya están en funcionamiento y, dentro de poco, lo hará también la de Torla, a la que solo le falta la conexión eléctrica. A estas les seguirán en verano las de Benasque- Ancilles, Canfranc-Estación. Asimismo, continuarán las obras de Hecho-Siresa, Cerler, Candanchú y la aglomeración de Panticosa, que incluye Panticosa, Escarrilla, El Pueyo de Jaca, Sandiniés y Tramacastilla de Tena. Toda ellas, dentro del Plan Pirineos, que está permitiendo la puesta en marcha de más de 100 infraestructuras con una inversión total que supera los 100 millones de euros. Actualmente, ya se encuentra al 85% de ejecución (93 actuaciones).

Recientemente, también se ha publicado en la Plataforma de Contratación del Estado la convocatoria de licitación del contrato de Construcción y Funcionamiento inicial de las EDAR de Villanúa, Boltaña y Aínsa, por un importe total de 24 millones de euros. El plazo para presentación de ofertas finaliza el próximo 9 de agosto a las 14.00 horas y las obras se iniciarán en el 2024. Con ellas, todas las aglomeraciones de más de 2.000 habitantes equivalentes en Aragón tendrán depuradora. De esta forma, solo quedarán pendientes siete pequeñas actuaciones que en su conjunto suponen 15,5 millones de euros. Por ello, las siguientes convocatorias del plan de depuración serán conjuntas y no en exclusiva para el Pirineo.

El Plan Pirineos se encuentra dentro del Plan General de Depuración 2022-2027, de 142 millones, de los que 104 millones son depuradoras del Pirineo. El segundo programa será general para todo Aragón y las convocatorias pasarán de 400 a 1.000 habitantes.

113,7M€ invertido en depuración en los últimos siete años

La inversión en depuración entre 2016 y 2023 ha sido de 113,7 millones de euros en 193 actuaciones. En el horizonte del 2022-2027, la revisión del Plan Aragonés de Saneamiento y Depuración contempla una inversión total hasta los 142,6 millones de euros, con el objetivo de conseguir depurar el 95% de la carga contaminante de todo Aragón y concluir las infraestructuras del Pirineo. En estos momentos, se depura el 90,5% de la carga contaminante de Aragón. Cuando termine el periodo de la revisión del PASD (2022-2027) todas las aglomeraciones de más de 1.000 habitantes equivalentes y buena parta de las de más de 400, tendrán depuradora. La colaboración de los municipios ha sido determinante para el éxito obtenido con el programa de subvenciones, del que ya se han resuelto cuatro convocatorias y se acaba de publicar completa la quinta, correspondiente a 2023.

Cambio de modelo

En 2018, el Gobierno de Aragón consiguió desbloquear el Plan Pirineos de Depuración paralizado durante 10 años, así como reducir el gasto de la inversión a menos de la mitad y devolver a los municipios la autonomía local para poder decidir sobre su sistema de depuración.

El anterior plan obligaba al Ejecutivo a la vinculación contractual con empresas concesionarias por valor de 358 millones de euros hasta 2030. Ese gasto se ha reducido a la mitad. Actualmente, se construye lo que se puede pagar con la recaudación del IMAR. De esta forma, no se hipoteca el pago de estas infraestructuras por las generaciones futuras durante 20 o más años.

En muchos casos se planteaban depuradoras sobredimensionadas. En el nuevo plan, se ha apostado por infraestructuras sostenibles, buscando lo más adecuado para cada lugar. Por eso, se dispone de distintos modelos y tecnologías: convencionales, extensivas, adaptando los criterios técnicos a la dimensión de los municipios, ya que la mayor parte de las actuaciones pendientes en materia de depuración se concentran en núcleos de pequeño tamaño.

La nueva orientación del Plan Pirineos establece que las infraestructuras de mayor tamaño (superiores a 1.000 habitantes equivalentes) sean ejecutadas directamente por el Instituto Aragonés del Agua y las de menos de 1.000 habitantes equivalentes, por los municipios a través de un programa de subvenciones puesto en marcha por el Gobierno de Aragón.

La redimensión del nuevo plan permitió estudiar las verdaderas necesidades de los municipios más pequeños del Pirineo y aplicar tecnologías extensivas. Las depuradoras extensivas se denominan así porque requieren mayor extensión, mayor superficie. En estas instalaciones la depuración se efectúa con elementos naturales: filtros de arena, gravas y plantas.

Su capacidad de depuración de nutrientes es limitada y no absorben bien las puntas de caudal. También les afecta la meteorología. Como ventajas destacan los costes de explotación, con poco o ningún consumo energético. Son adecuadas para poblaciones pequeñas, de no más de 1000 habitantes equivalentes.

Nueva FP de redes y estaciones de tratamiento de aguas

Además de la inversión en la depuración sostenible económica y medioambientalmente, el Gobierno de Aragón también planifica la repercusión laboral y formativa. Por ello, el próximo curso escolar 2023-2024 se pone en marcha un nuevo grado medio de Formación Profesional en Aragón de redes y estaciones de tratamiento de aguas que se cursará en el IES Virgen del Pilar en Zaragoza, dando respuesta a la necesidad de formar a profesionales capacitados puesta de manifiesto por el tejido empresarial a través del clúster Zinnae, con el que el Gobierno de Aragón ha firmado un convenio en materia de formación e innovación para posibilitar que las empresas implementen proyectos de innovación en las instalaciones de depuración del Gobierno de Aragón.