El lavado de imagen de las empresas respecto a sostenibilidad llega a su fin
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Esta semana, el jefe de la División de Medio Ambiente de Emasesa, Benigno López, ha participado en la jornada organizada por CESUR, en colaboración con Ecoterrae, "El impacto de la sostenibilidad ambiental en las empresas".
En este foro, el representante de Emasesa ha hecho hincapié en el papel de las empresas que gestionan el ciclo urbano del agua, y que son los principales operadores ambientales de su entorno. En su exposición ha puesto de manifiesto la obligación que tiene los gestores públicos del agua de adoptar el papel de impulsores y agentes de transformación ambiental en su ámbito de influencia, dado que son responsables de la viabilidad de un recurso básico para la vida y el desarrollo económico como lo es el agua.
De hecho, estas empresas gestionan aspectos ambientales muy diversos que sumados a la magnitud de éstos afianzan que la parte ambiental de la sostenibilidad esté muy presente. En palabras de Benigno López, “somos empresas ambientales”.
En el desarrollo de su ponencia, López ha puesto como claro ejemplo la situación actual de sequía. A diferencia de las medidas adoptadas en la sequía de los 90, ahora no se conciben cortes en el suministro, por su importante repercusión tanto desde el punto de vista económico, como social. En este sentido, ha destacado el importante esfuerzo realizado por parte de la ciudadanía, que ha logrado bajar su consumo de agua de los 176 litros diarios por habitante en 1992, a los 116 en 2020. Esto unido al esfuerzo realizado por EMASESA en la reducción de fugas ha permitido la reducción de la dotación para el abastecimiento en cantidades significativas, lo que posiblemente sea uno de los mayores éxitos ambientales conseguidos en Sevilla y su área metropolitana.
En su intervención ha explicado que la situación actual tampoco es la misma que la de hace unos años, ya que ahora nos encontramos con un nuevo estresor sobre el recurso como es el cambio climático. Con independencia de que tengamos que tomar medidas para reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero y mitigar nuestra contribución al cambio climático.
López ha recalcado que urge adaptarse al cambio ya existente. Ha recordado que este cambio tiene como principales amenazas la mayor recurrencia de episodios de sequías y de lluvias torrenciales, que ponen el riesgo el corazón de la actividad de los operadores de agua
Sobre la gestión de las sequías, Benigno López ha apuntado a que su gestión debe realizarse en los momentos previos a encontrarnos en situaciones de escasez, es decir, cuando exista un volumen suficiente para afrontar el abastecimiento con garantías, en, al menos, un año y medio.
El responsable técnico de Emasesa, ha concluido su ponencia haciendo mención a herramientas que hoy en día son de primer orden para la gestión sostenible de las empresas en las circunstancias actuales, como son el cálculo de la Huella de Carbono, la Huella Hídrica o los criterios de circularidad. Los requerimientos legislativos, los planes y programas estatales y autonómicos, además de las peticiones de las partes interesadas (entre ellas los clientes/ciudadanos) nos llevan, según apostilla Benigno López, “al único camino posible y es el de integrar la parte ambiental de la sostenibilidad en las empresas, asumiendo ésta desde el diseño de los productos, desde la responsabilidad social empresarial, y como un aspecto más del negocio. En definitiva, la época del greenwashing ha finalizado”.