Europa recomienda incentivar la devolución de dispositivos móviles para garantizar su reciclaje

La Comisión Europea ha adoptado un conjunto de recomendaciones políticas para que los Estados miembros mejoren e incentiven la devolución de teléfonos móviles, tabletas, ordenadores portátiles y sus cargadores usados ​​y desechados. Las recomendaciones tienen como objetivo ayudar a las autoridades nacionales a garantizar tasas máximas de recogida y posterior reutilización, reparación, restauración y recuperación de estos pequeños dispositivos electrónicos.  

La tasa de recogida de pequeños dispositivos electrónicos en toda la UE sigue siendo baja. Por ejemplo, se informa que la tasa de recogida de teléfonos móviles es inferior al 5% y se estima que en los hogares de toda la UE hay un stock de 700 millones de teléfonos móviles sin usar y desechados.  

Estos dispositivos también son ricos en materiales preciosos, en particular materias primas críticas. Un solo teléfono inteligente contiene tierras raras en el imán, cobalto en la batería, indio en la pantalla y tantalio, galio y metales preciosos en la placa de circuito impreso.  

Aumentar la reparación y reutilización de pequeños aparatos electrónicos, así como el reciclaje de residuos de dichos equipos, apoyará el cambio hacia una economía circular, contribuirá a la seguridad del suministro de materias primas y energía críticas y mejorará la autonomía estratégica de la UE. 

Las recomendaciones de política incluyen: 

• Incentivos financieros como descuentos, vales, sistemas de devolución de depósitos o recompensas monetarias. Los incentivos deberían apuntar a los pequeños aparatos electrónicos de consumo que ya no funcionan pero que permanecen en los cajones de los hogares. También deberían centrarse en los pequeños aparatos electrónicos que funcionan y que la gente ya no utiliza pero que aún pueden revenderse, reutilizarse o repararse. Al utilizar estos incentivos, los consumidores deben estar preparados para tomar decisiones informadas; por ejemplo, deberían poder calcular el valor de un dispositivo.  
• Aumentar el uso de los servicios postales para devolver teléfonos móviles, tabletas y ordenadores portátiles usados ​​y desechados, por ejemplo proporcionando sobres o etiquetas prepagos a los consumidores para que devuelvan sus dispositivos.   
• Establecer asociaciones entre organizaciones de reutilización y operadores de sistemas de recuperación y establecer objetivos de reutilización y preparación para la reutilización.  
• Aumentar la conciencia y mejorar la comodidad y visibilidad de los puntos de recogida donde las personas pueden devolver pequeños productos electrónicos. La información sobre los puntos de devolución más cercanos se puede agregar a mapas, herramientas de búsqueda y aplicaciones fáciles de usar. En los puntos de devolución, también se debe informar a las personas de que todos los datos personales almacenados en sus dispositivos se gestionan y eliminan correctamente. 

Hay más de 700 millones de teléfonos viejos tirados en nuestros cajones: casi dos por cada habitante de la UE. A los ciudadanos muchas veces les resulta difícil decidir qué hacer con ellos. Podemos aclarar y facilitar la devolución, reparación y reciclaje de dichos productos. Las recomendaciones de hoy se centran en medidas e incentivos eficaces para aumentar la tasa de recogida de pequeños aparatos electrónicos en toda la UE, dándoles una segunda vida. Es beneficioso para todos: las personas pueden beneficiarse de muchas maneras, mientras la economía circular crece y no perdemos materias primas críticas. - Virginijus Sinkevičius, Comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca  

Se invita a los Estados miembros a considerar la Recomendación de la Comisión y tomar medidas pertinentes para apoyar la implementación efectiva de la legislación de la UE sobre residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (Directiva RAEE), en particular las obligaciones de recogida selectiva y recuperación que deben hacer cumplir los Estados miembros. 

Desde 2002, la UE ha regulado los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) para prevenir y reducir sus impactos nocivos sobre el medio ambiente y la salud humana. La Comisión evaluó y revisó la Directiva RAEE en 2012. La Directiva prevé la recogida selectiva de RAEE y exige a los Estados miembros que establezcan sistemas de recogida para permitir a los consumidores devolver dichos residuos. Se establecen responsabilidades específicas para los municipios, los productores, los distribuidores y los minoristas. La Directiva ha fijado objetivos ambiciosos no sólo para la recogida de RAEE sino también para la preparación para su reutilización, reciclaje y recuperación.  

Tanto el Pacto Verde Europeo como el Plan de Acción de Economía Circular exigen explorar opciones para mejorar la recuperación de pequeños productos electrónicos de consumo. La Comisión llevó a cabo un estudio que analizó diferentes tipos de sistemas de recuperación .  

Sobre esta base y teniendo en cuenta la importancia de recuperar materias primas críticas procedentes de RAEE, tal como se aborda en la Comunicación de la Comisión sobre un suministro seguro y sostenible de materias primas críticas en apoyo de la doble transición, la Comisión adoptó esta Recomendación de la Comisión dirigida a los Estados miembros para mejorar específicamente la tasa de retorno de estos dispositivos.